Mejoramiento del Frenado del Vehículo
El primer paso para un mejor frenado es asegurarse de que todos los componentes están funcionando como deben. Esto significa que el servofreno no tenga fugas de vacío y que esté suministrando la fuerza adecuada a la bomba de freno, que la bomba no presente fugas, y que las pinzas no tengan empaques rotos, fugas en los pistones, o corrosión que dificulte el movimiento. Si las pastillas no se retractan por completo del disco, se desgastarán prematuramente y retendrán más calor, lo que puede afectar al rendimiento.
Si su vehículo tiene sistema ABS, asegúrese de que no haya una luz de falla del ABS, o haga revisar el sistema por el concesionario o un taller especializado para asegurarse de que funciona correctamente.
A continuación, debe asegurarse de que el líquido de frenos se cambie completamente cada año. El líquido de frenos es una sustancia isotrópica, lo que significa que absorbe agua del ambiente, y dado que el depósito del líquido de frenos es ventilado, cualquier humedad en el aire eventualmente terminará en el líquido.
Dado que el agua es más compresible que el líquido de frenos, y también hierve a una temperatura mucho más baja, la humedad dará lugar a un pedal blando, y la corrosión cobrará la vida de los componentes del sistema de frenos. Utilice un fluido de alta calidad para satisfacer las especificaciones del fabricante (por ejemplo, el DOT-3), preferiblemente con un punto de ebullición "en seco". Un cambio más frecuente del fluido es recomendable en aplicaciones exigentes, tales como el automovilismo o el uso de remolques.
Una vez que los temas anteriores sean atendidos, orientamos nuestra atención hacia unas pastillas de alta calidad que mejoren la efectividad del frenado.
Después de las pastillas, una mejor refrigeración del rotor del freno mantendrá las pastillas más frescas, que a su vez reducirá la cantidad de calor transferido a las pinzas. Esto reducirá la posibilidad de que el líquido haga ebullición y cause un pedal blando.
Por último, no hay que ignorar el uso apropiado de los frenos como una forma de mejorar el rendimiento del sistema de frenos. No presione los frenos en ocasiones innecesarias. En caso de emergencia, frene duro inicialmente y luego baje la presión sobre el pedal. Esto mantendrá una temperatura más baja en los componentes, y aumentará la efectividad del frenado. Recuerde, además, utilizar las relaciones de caja como ayuda al sistema de frenos cuando esté bajando por una pendiente muy larga.
